Archivos para septiembre, 2010

Encontró una falla en el sistema de seguridad de la página, la cual aprovecharon los hackers.

Pearce Delphin, que en Twitter aparece con el seudónimo @zzap, y vive en la ciudad de Melbourne con sus padres, introdujo un código Javascript como texto normal en un mensaje que desencadenaba la apertura de páginas web con tan sólo pasar el ratón por encima.

Los hackers se aprovecharon de la idea y usaron durante cerca de cinco horas el código para redirigir a los usuarios hacia páginas pornográficas o crear tweets (mensajes) que se repetían cada vez que eran leídos.

«Lo hice sólo para ver si se podía hacer (…) ver si el código Javascript podía utilizarse en un tweet», afirmó el joven por correo electrónico.

«Al enviar mi tweet, nunca imaginé que esto podría acabar así», añadió.

Millones de cuentas se vieron afectadas, como la de Sarah Brown, esposa del ex primer ministro británico, cuyos mensajes siguen más de un millón de personas.

El portavoz de la Casa Blanca Robert Gibbs envió un mensaje diciendo: «Mi Twitter delira. Llamo a los técnicos».

Twitter se disculpó el martes ante sus millones de usuarios. Uno de los responsables del equipo de seguridad del portal de microblogs, Bob Lord, aseguró que no resultaron afectados los datos de las cuentas personales.

Sídney (Australia)
AFP

Tomado de EL TIEMPO

http://www.eltiempo.com/tecnologia/actualidad_a/australiano-de-17-anos-fue-el-causante-del-caos-en-twitter_7950100-1

Es una nueva versión que ocultó el segundo oficial del transatlántico, Charles Lightoller.

Al parecer, en el viaje inaugural del Titanic desde Southampton a Nueva York en abril de 1912, la tripulación sí vio a tiempo el iceberg, pero de todas maneras el buque se estrelló contra la masa de hielo, por culpa de dicha falla humana.

La nieta del oficial Lightoller, la escritora Louise Patten, de 56 años, reveló lo ocurrido en su nueva novela ‘Good as Gold’.

Su abuelo murió antes de que ella naciera, pero Patten vivió con su abuela, que le contó lo sucedido.

El error, que le costó la vida a 1.517 personas, se produjo porque en el buque había dos sistemas de dirección sometidos a dos mandos distintos y uno estaba situado frente al otro.

Era la época de transición de la navegación a vela a la navegación a vapor, y muchos de los navegantes de entonces, incluidos muchos oficiales del Titanic, habían estado antes al mando de buques de vela.

De ahí que estuvieran acostumbrados a dar órdenes según el viejo sistema, lo que significa que si uno quería que el barco fuera en una dirección, había que girar el timón en la opuesta.

El nuevo sistema era, por el contrario, como conducir un carro: se mueve el volante hacia la misma dirección a la que se quiere ir.

La orden de girar a babor significaba que había que girar la rueda a la derecha bajo el viejo sistema y a la izquierda, según el nuevo sistema.

Cuando el primer oficial, William Murdoch, avistó el iceberg a dos millas de distancia, dio la orden de «fuerte a estribor», fue malinterpretado por su subordinado Robert Hitchins, que giró el buque a la derecha en lugar de a la izquierda.

Aunque casi inmediatamente se le advirtió del error y se le dijo que lo corrigiera, era ya demasiado tarde.

[…]

Lightoller falleció en 1952 -por entonces estaba considerado un héroe por su papel en la evacuación de Dunquerque en la Segunda Guerra Mundial-, y su familia no quiso revelar la verdad hasta ahora por temor a arruinar su reputación.

Londres (Inglaterra)
Efe

Tomado de EL TIEMPO

«Manda quien puede, obedece quien quiere»

Publicado: septiembre 14, 2010 de andresyoshie en Fetichismo Juridico

Las últimas políticas contra el aborto están contenidas en  la sentencia C-355 de 2006, mediante la cual la Corte Constitucional de Colombia lo despenalizó en casos como:

  • La malformación del feto.
  • El riesgo de muerte de la mujer.
  • La violación de la mujer.

Esto es un gran avance (aun incompleto) en materia de derechos de igualdad entre hombres y mujeres.

Pero abordemos el tema desde un punto de vista no tan especifico del asunto, esta ley más que una nueva normativa para regular el aborto, ha sido y ha creado una nueva concepción acerca de este tema, dejando en muchos casos de ser un tabú en la sociedad. No hace falta remontarnos muchos años atrás, cuando el aborto era considerado más que un delito, un pecado (concepción enteramente religiosa), por lo cual hacerlo era un acto demencial, castigado social, legal, y religiosamente. Y gracias precisamente a normativas como la anterior es que ahora ya el aborto es algo muy común en nuestra sociedad actual. Quiero hacer la distinción clara de que mi posición no es totalmente pro-aborto, mas sin embargo, los tres casos mencionados anteriormente si justifican realizar esta práctica.

Como podemos ver, precisamente estas normas han sido un factor de transformación social, de cambio y si se puede llamar, mas en especifico de evolución de la sociedad hacia la culturización. Claro aspecto relacionado con la eficacia simbólica de la norma, la cual nos dice que mas allá de que la norma exija un determinado acto o comportamiento, el derecho nos ayuda a modificar la percepción y el concepto social de las normas y de las situaciones implicadas, es por eso que  el aborto ya es un tema común, distanciado ya de un pensamiento totalmente clásico y conservador religioso-radical como el planteado anteriormente

Siempre estamos en constante remodelación jurídica, y más que todo, esto en la política se hace para mantener contento al pueblo, que a medida que se desarrolla, crea nuevas necesidades y modifica las anteriores. Para esta finalidad es que el derecho está constituido como un sistema de mensajes de “alivio” para la comunidad, alivio que se ve reflejado en votos y en apoyo político, así no se tenga como propósito primordial (lo cual es casi imposible), pero siempre va incluido. Esto nos deja en un juego de intereses, pero es un arma de doble filo ya que no basta solo con prometer, crear normas complacientes, calmar a la sociedad, si de esa eficacia simbólica no se puede pasar a una eficacia instrumental en sí que ya respalde el sentido de la norma. Ejemplificando, la sentencia obliga a las entidades medicas a realizar abortos en específicamente los 3 casos mencionados, pero sin embargo en algunas clínicas privadas por motivos enteramente éticos, no se es practicada así sea obligatoria, y la ley pasa a un segundo plano con un motivo de “mayor peso” para no cumplirse.

Fetichismo jurídico según Lemaitre, es la capacidad de engañar a la gente a través de normas y hacer que la gente crea en ese engaño ciegamente. Las mujeres creen en ese engaño ciegamente, al suponer que ya porque es ley, se debe cumplir a total cabalidad el aborto permitido, al creer que ya se está dando ese paso en  la igualdad de géneros, pero se estrellan con la realidad cuando les dicen que “no se practican abortos de ninguna clase por la prevalencia del derecho a la vida”. Entonces a que estamos jugando, a que no cumplo porque no quiero, porque no puedo, porque va contra mi moral, porque no me conviene, etc. Se supone que la ley debe estar por encima de eso porque es para todos por igual, sin preferencias y muchos otros elementos de un discurso político, pero como muy bien citaba Mauricio García, “Manda quien puede, obedece quien quiere”.

Andrés Felipe Tarazona T.                          201016122

El uso del derecho en una falsa democracia.

Publicado: septiembre 13, 2010 de andresoviedo en Fetichismo Juridico

La libertad de prensa es definida como la libertad que tienen las personas para consumir, difundir y crear medios de comunicación y está garantizada en la declaración universal de los derechos humanos por medio del artículo 19 que enuncia:

  • “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.”[1]

Sin embargo, la libertad de prensa en La república bolivariana de Venezuela, es de carácter muy reducido y  según algunas organizaciones como Freedom House[2], es nula. Esto debido a que el gobierno venezolano actualmente sigue una línea autoritaria, en la que se concentra el poder en una figura presidencial, se ponen en marcha los organismos estatales en pro de la ideología del mandatario y en la que las opiniones contrarias no tienen cabida y buscan ser reprimidas. En los últimos años se han visto diferentes casos en los que se demuestra la violación de estos derechos en el vecino país:

  • En 2007 no se le renovó la licencia de RCTV, que tuvo que salir del aire y limitarse a emitir desde entonces a través de una plataforma de cable.
  • En 2008 se le revocó la licencia de 34 emisoras de radio.
  • Durante el año 2009, según datos de Amnistía Internacional, cerca de 600 manifestantes han resultado heridos, al menos 14 con armas de fuego, y otros nueve murieron.
  • La decisión abortada del juez William Páez que prohibía a toda la prensa publicar imágenes violentas o de hechos de sangre bajo el argumento de proteger la integridad psíquica y moral de los infantes.

Toda ésta suma de hechos han llevado a que personas como el ex presidente de la comisión interamericana de derechos humanos, Carlos Ayala Corao, denunciara que en la última década el poder judicial venezolano ha tomado diferentes resoluciones que ponen en tela de juicio las disposiciones de la carta magna y la jurisprudencia de la CIDH[3].

En las sociedades modernas se ha venido acuñando el concepto de fetichismo jurídico, que quiere decir que las diferentes relaciones sociales que puedan nacer dentro de una comunidad y entre un numero de individuos tienden a ser analizadas y enmarcadas dentro de un cuadro jurídico, dejando de lado diferentes factores sociales, históricos y demás que resultarían bastante útiles. Por ésta razón se presenta una creciente apropiación del derecho por parte de diferentes actores, pero con significativas diferencias de fondo en el uso que estos le dan al mismo. Según Julieta Lemaitre se pueden distinguir básicamente tres usos del derecho desde diferentes percepciones  :

  • La concepción marxista: El uso del derecho es opresivo y coercitivo, pues el derecho es un elemento que pertenece al estado creado por la burguesía que propende por conservar el status quo.
  • La concepción liberal: El uso del derecho es descrito por el carácter emancipador que éste tiene al ser utilizado por los ciudadanos.
  • La concepción intermedia: El uso del derecho como instrumento de poder y de limitación de poder.

Si se analiza el caso puntual de Venezuela y las decisiones judiciales que se han venido tomando en la última década desde un punto de vista netamente nacional, se notará fácilmente que el uso del derecho que se está presentando es el que Lemaitre define desde la concepción marxista, se ha venido utilizando el derecho para justificar, promover y sostener bajo la premisa de una lucha socialista un régimen autoritario, en el cual la libertad es reprimida, los intereses y derechos públicos son disminuidos al límite más bajo, y las violaciones a los derechos humanos son cosa de todos los días. Pues los jueces convierten el derecho en un instrumento que les facilita la represión de los ciudadanos y que por medio de su aplicación permitirá la conservación de un status quo.

Sin embargo, al hacer un análisis de las diferentes resoluciones que se han tomado por parte de otros actores jurídicos como la CIDH, Reporteros Sin Fronteras y diferentes movimientos sociales en Venezuela que luchan por la libertad de prensa, se puede afirmar que estos actores les están dando al derecho un uso desde la concepción liberal, pues se presenta una apropiación del derecho para buscar una emancipación, un goce efectivo de las libertades públicas  y  una limitación del poder que puede ejercer un gobierno determinado sobre su población dentro de un territorio.

El derecho es un instrumento que posee diferentes facultades y debe ser utilizado de manera muy cuidadosa, pues puede ser útil para la consecución de una vida digna o para la degradación y opresión del ser humano, está en cada uno de los actores jurídicos la decisión sobre como utilizarlo.

Andrés Felipe Oviedo Cifuentes.


[1] http://www.un.org/es/documents/udhr/index.shtml

[2] http://www.freedomhouse.org/template.cfm?page=251&year=2009&country=7733

[3] Corte interamericana de derechos humanos.

«Políticas de Estado».

Publicado: septiembre 13, 2010 de juanosma en Fetichismo Juridico

Recientemente, leí unos artículos sobre la libertad de prensa y la libertad de expresión del  Universal. Uno de los artículos toma la problemática que existe en México sobre los indígenas que según algunos voceros se les dice que “ensucian la ciudad con su presencia”, son palabras fuertes para tratar a un ser humano. El otro artículo trata sobre uno de los muchos y ya usuales problemas en Venezuela, la libertad de prensa.

Primero tocaremos el tema de Venezuela. Es grave pensar, que ya en el siglo XXI algunos gobiernos sigan teniendo un pensamiento retrogrado y autoritario como es el caso de Hugo Chávez, presidente de Venezuela. Como bien se sabe, en Venezuela la libertad de prensa y muchos otros órganos administrativos son controlados por el autoritarismo del Estado, como la expropiación de bienes para que vengan a “forma parte del “Estado”[1]”. Ahora el problema que nos compete, la prohibición y el destierro de la cadena televisiva RCTV de Venezuela por ir en contra de los ideales del Estado bolivariano. En cierta medida es apreciable utilizar el derecho para un fin utilitarista, es decir limitar ciertos aspectos de la libertad de expresión como por ejemplo no grabar a niños o no mostrar cosas sangrientas para el beneficio de la comunidad, pero si es elemental respetar el derecho de proponer ideales de cambio, ideales distintos a los existentes; proponer un espacio de interacción con los opositores del gobierno, un buen Estado sabe escuchar a sus habitantes.

El caso de México es más importante, es cierto que la globalización y el proceso de adaptación al medio han deteriorado las culturas indígenas en América. Sin embargo, eso no indica que podamos negar la identidad y existencia de estas culturas. Hablar que unas personas dañan la fachada de una ciudad indígena por naturaleza es irónico, y más en un país como México. Podrían implementar excusas diferentes que no afectan a la sociedad y pueden mantener un orden, por ejemplo pueden reubicarlos como hicieron aquí en Bogotá, Colombia., brindándoles un puesto y adaptándolos a la cultura histórica de la ciudad. “Reubicarlos”[2] es diferentes puestos de la ciudad acorde a los gustos de ellos es antes un beneficio monetario y cultural para México. Así que no solo gana el Estado en forma subjetiva, ganan los dos, el indígena obtiene su forma de sobrevivir y se le respetan sus derechos fundamentales además se que se le da un reconocimiento y el sentimiento de aportar culturalmente a su país, el cual fue indígena antes de la “modernización”[3] de Europa aquí en América.

El fetichismo jurídico[4] que se hablará unirá las dos partes en un solo derecho que me parece fundamental y maneja los dos casos, el derecho a la libre expresión, es cierto que el derecho existe para controlar la vida en sociedad del ciudadano, por eso es inaudito que existan problemas entre el Estado y el ciudadano. El derecho es la herramienta de la persona para llegar al Estado, no la herramienta del Estado para alejar al pueblo de su calidad de ciudadano.

Es esencial que los derechos de las personas se respeten y no solo se respeten, si no que en lo posible hagan al Estado como un mal cada vez menos necesario[5]. En estos dos casos especiales se puede usar el derecho como una herramienta de emancipación de la “tiranía del Estado”[6] para que haya una esperanza y una ilusión de la persona de pensar que podrá sobrevivir en esta sociedad que es temible y despiadada.

Por último y como una pequeña reflexiones para nuestros queridos lectores, el derecho es la capacidad de actuar de cada persona, así que depende de cada quien como puede hacer un uso subjetivo del derecho sin afectar el derecho de los demás, recuerden que todos los elementos rodean a la sociedad contienen un carácter moral y que cada quien tiene un concepto distinto de las cosas, pero hay que respetar esa moral universal que se debe respetar, el derecho es una gran herramienta de emancipación de la subyugación del Estado y de beneficios para el diario vivir, pero hay que saber usarla.


[1] Se habla de un “Estado” porque no se puede considerar como tal, es más una figura autoritaria disfrazada de democracia.

[2] Reubicarlos en un sentido estricto, es decir de un beneficio de mutuas partes, tanto las indígenas como la fachada del Estado.

[3] Al momento en que llega el europeo a América, se da un proceso de “europeización” del indígena, a lo cual se le puede llamar “modernización” debido a que en esa época se estaba implantando el modelo “Moderno” en Europa.

[4] Julieta Lemaitre. El derecho como conjuro, fetichismo legal, violencia y movimientos sociales.

[5] Norberto Bobbio. Estado, gobierno y sociedad. Cap. III

[6] Thomas Hobbes, en el Leviatán, dice que el Estado ha sido creado como un ente externo a lo humano que mediante su figura de tiranía implantaría el miedo en los habitantes de la sociedad y que por el miedo podrían vivir en sociedad.

Frente al caso de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres en Colombia el Derecho actúa como una herramienta de control.

Herramienta de control debido a que mediante las disposiciones promulgadas por la Corte Constitucional de Colombia busca no sólo proteger los derechos de las mujeres colombianas sino además, incentiva o desanima llevar a cabo ciertas conductas. Por ejemplo, el aborto en Colombia, el cual desde el año 2006 no es constitutivo delito en tres casos específicos según la sentencia C-355 de 2006, mediante la cual la Corte Constitucional de Colombia lo despenalizó en casos como:

  • La malformación del feto.
  • El riesgo de muerte de la mujer.
  • La violación de la mujer.

Así, una mujer colombiana tiene el derecho de acceder a servicios de salud en cualquiera de los tres casos anteriores y obligarles a que se le sea practicado un aborto si es esa su voluntad.

Un argumento en contra asegura que a pesar de que la Corte Constitucional busque regular el número de casos de aborto en el país,  aún no es clara la cifra de abortos legales que se comenten anualmente. Así, ni el Ministerio de la Protección Social ni La secretaría de Salud ni la publicación médica The Lancet rinden informes compatibles unos de los otros, presentando cada uno cifras diferentes del número de abortos legales realizados en Colombia. Si ésta situación es analizada desde ahí hasta los casos que se dan fuera de los estipulado por la ley se podría cuestionar la eficacia de dicha sentencia desde el impacto que provoca en la sociedad hasta el desconocimiento del número de abortos anualmente dados en nuestro país.

“Ni las cifras oficiales permiten una idea general y creíble de la aplicación real de la ley, ni las organizaciones sociales y organismos internacionales se ponen de acuerdo”[1].

Ahora, mi argumento a favor sobre la eficacia de la sentencia C-355 de 2006 consiste en que al aprobar su realización en esos tres casos determinados se estaría obligando a entidades médicas a prestar dicho servicio aunque no coincida con sus presupuestos morales.

Así como sucedió en el caso de una mujer colombiana que acudió al hospital San Ignacio (adscrito a la Pontificia Universidad Javeriana) de Bogotá con una orden del juez para que le fuese practicado el aborto. El hospital de los jesuitas se negó a prestarle el servicio aunque ella voluntariamente, por malformación del feto, quería interrumpir su embarazo presentando uno de los tres casos en los cuales es despenalizado. La devoción católica de dicha entidad adscrita a la Pontificia Universidad Javeriana no acepta el aborto como alguna medida permitida a realizar en los establecimientos de dicho hospital.

Debido a la violación del derecho de aborto de dicha mujer, el centro asistencial fue sancionado con una multa de 11,53 millones de pesos.

La directora de programas de WLW (Women’s Link Worldwide) justificó dicha decisión señalando: «Porque le fue negado el derecho a la mujer de interrumpir un embarazo cuando el caso cabía dentro de las circunstancias legales»[2].

Por otra parte, el centro asistente “recurrió a la objeción de conciencia institucional para no realizar la intervención médica”, pero aún así su argumento no fue de gran controversia frente al incumplimiento de dicho derecho aunque incluso el derecho a la vida fue expuesto como argumento a favor de la decisión tomada por el hospital San Ignacio de Bogotá.

“… Siendo así las cosas, el Estado no puede —y la Corte Constitucional lo sabe— obligar a terceras personas a cometer delitos. Debe saber entonces la opinión pública que la sanción impuesta al hospital en mención no se fundamenta en el fallo de la Corte Constitucional ni tampoco en ninguna ley, sino en un decreto arbitrario (decreto 4444/06) del Ministerio de la Protección Social”[3].

La sentencia C-355 de 2006 como un fallo vigente e ineludible se torna una herramienta de control en los casos de aborto en Colombia.

Aunque algunos consideran que en Colombia el derecho toma un papel como instrumento de emancipación, basándose en el fetichismo jurídico expuesto por Julieta Lemaitre Ripoll, el cual evoca la capacidad del derecho de engañar y generar una esperanza para que, según éste caso las mujeres crean que la ley si está haciendo algo por ellas, mi posición aún no declina frente a esos argumentos y por ende, así, mediante el caso anterior justifico que el derecho protege y actúa como herramienta de control en los casos que hacen alusión a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres en Colombia.

Dianny Alejandra Rincon G.

201013786


[1] http://www.elespectador.com/articulo126831-cuentas-y-los-cuentos-del-aborto

[2] http://www.elespectador.com/articulo139731-sancionado-hospital-san-ignacio-negarse-hacer-un-aborto

[3] http://www.elespectador.com/lectores-opinan/columna140700-el-hospital-san-ignacio-y-el-aborto

Brasil: Momento de fetichismo legal para la comunidad LGBT

Publicado: septiembre 13, 2010 de ginnochaparrosilva en Fetichismo Juridico

Actualmente en Brasil se vive una gran revolución en materia de Derechos humanos y en concreto sobre los derechos de los homosexuales, esto en un marco de punga entre sectores conservadores y grupos progresistas en la sociedad. Los grupos conservadores en el caso de Brasil son principalmente instituciones como las fuerzas militares y la iglesia (principalmente), que buscan mantener o frenar los cambios sociales mediante el derecho. Mientras que los grupos progresistas como el gobierno de Lula y en general la comunidad LGBT,  tienden a concebir el derecho como un instrumento para el cambio social y favorecer la diversidad.

En el caso de Brasil la concepción generalizada  del derecho (a juzgar por la declaración de un líder LGBT) aparentemente no es para nada conservadora, lo único en extremo conservador en Brasil es cierta parte violenta de la población y también las  instituciones religiosas. Estas partes de la población propagan varios tipos de discriminación como por ejemplo la discriminación social, que se manifiesta en la violencia física, verbal, asesinatos, etc. También se puede identificar la violencia institucional que se materializa en el rechazo en colegios y por una fuerte posición desfavorable por grupos religiosos.

Este debate entre grupos progresistas y conservadores está marcado por fuertes contrastes. Ciertos sectores conservadores o personas con principios conservadores han mostrado un grado tal de discriminación que en 2008 se registraron 190 homicidios a homosexuales (64% de las víctimas eran gays, 32% travestis y 4% lesbianas.)(Fuente: 180.com.uy), también en agosto del presente año (2010) se registró la muerte de un joven y otros 17 heridos, en una marcha por el orgullo gay, el joven recibió un balazo en medio de una lucha entre grupos rivales (Universogay.com). Por otro lado el gobierno de Brasil en cabeza de su presidente Luis Ignacio Lula Dasilva,  inauguró la I conferencia nacional de LGBT. Así mismo el congreso ha promulgado leyes que consagran el respeto de los derechos LGBT. Por último y no menos importante se tiene la emblemática sentencia mediante la cual se permitió la adopción de una niña a una pareja de lesbianas (Brasil). A pesar de todo este apoyo se ha demostrado como el hecho de “salir del closet” en Brasil es extremadamente peligroso, hasta el punto de perder la vida. Estos son los fuertes contrastes en este debate.

Sin embargo, a mi parecer en Brasil no se puede hablar de un sistema de gobierno conservador, a pesar de que haya manifestaciones violentas que se den en masa, hay que tener en cuenta que socialmente este tipo de actos se han estado reprochando socialmente, lo cual se concretó con dicha ley contra la discriminación homofóbica (Ley 122/2006). Por esta razón puede decirse que son actos que se han convertido progresivamente en hechos aislados. Esta razón es fundamental para ilustrar la concepción institucional de Brasil del derecho. En esta medida se puede decir que se reprocha la violencia contra los nuevos movimientos sociales, ello da muestra de que se les quiere respetar. A pesar de la continuidad del rechazo contra  la comunidad LGBT se tiene legislación contra ello y de lado a esto se tiene al gobierno trabajando por la inclusión social y el respeto por los derechos humanos, el cambio y la diversidad. En conclusión estas circunstancias nos llevan decir que el sistema en Brasil concibe al derecho como un mecanismo de transformación social (En su mayoría),  y que los grupos conservadores no les queda más opción que actuar fuera del derecho (asesinando, discriminando, etc) para frenar un poco lo que les parece mal.

Históricamente han existido las dos concepciones sociológicas del derecho (el ala conservadora y el ala progresista), las dos son antagónicas por su naturaleza contraria y en algunas ocasiones prevalece una sobre la otra. En   todo caso nunca van a dejar de coexistir dado que se perdería la esencia del Derecho, en el sentido en que el derecho en algunas ocasiones frena el cambio social y en otras lo alienta, esto cuando sea necesario en cada caso. En Brasil por ejemplo los grandes cambios sociales hacen necesaria un momento de gran cambio social, “alentado” o aceptado por el Derecho. En esa medida se han dado grandes logros jurídicos sobre derechos LGBT y ello ha llevado a que haya en la comunidad LGBT un fenómeno o momento de gran fetichismo legal (Fetichismo legal, violencia y movimientos sociales. Lemaitre, 2009), es decir de experimentar placer al ser reconocidos sus derechos legalmente. Esto por supuesto en un país con gran cantidad de población LGBT y en un momento de gran transformación social.

Ginno Chaparro Silva (201012539)



Encuesta sobre la ley 1335 del 2009 Art. 3 (parágrafo)

Publicado: septiembre 10, 2010 de juanosma en Ley Anti-Tabaco

Lastimosamente no es muy buena la imagen y tuve muchos problemas para poder arreglar el sonido, así que sale un poco defectuoso. Igual ya había comentado esto con Carlos Baquero, nuestro monitor de Sociología Jurídica.

Edwin es un nombre inventado porque la persona no quiso dar su verdadero nombre. Tampoco fue grabado por miedo a lo que pudiera pasar a raíz de ésta entrevista, lo que me parece lógico. También, Edwin, hace que la entrevista sea más sensata y más acorde a lo que se desea saber.
Parte 1

Parte 2

Tomado del periódico El Tiempo. Domingo 5 de septiembre de 2010.

Hace años, Richard Dawkins alborotó el mundo con su campaña: «Probablemente Dios no existe, disfruta tu vida», que el autor de El gen egoísta inscribió en buses de Londres y Barcelona. Pero el escándalo se disolvió entre otros espantos peores que la declaración humorística de un científico. Gaza e Irak. Y los incendios propios de la temporada.

La polémica acaba de ser renovada por Stephen Hawking. Al afirmar en su último libro que Dios es una hipótesis inútil para la comprensión del Universo. Alguna vez hice un chiste malsano que expresa un hecho intrigante. La ciencia moderna, dije, está amojonada por los nombres de Galileo que dijo que sin embargo se mueve, y de Hawking que sin embargo no se mueve. Dios es un ironista. E hizo nacer a Hawking el 8 de enero de 1942, día del tricentenario de la muerte del otro.

El de Pisa prefirió conservar su vida frente a los brujos del Vaticano y se retractó. El oxoniense, contra sus afirmaciones escandalosas, es considerado uno de los mayores genios de la humanidad junto a Newton y Einstein. Los mismos de cuyos sueños surgieron, la fantasía de lo material como lo entendemos hoy. Y el monstruo de la bomba que nos mantiene en vilo suspendida sobre nuestras cabezas por obra y gracia de los perros de presa del militarismo judeocristiano. Hoy tan perturbados por la posibilidad de que los imanes de Alá se hagan con el horno satánico que ellos probaron en el Japón en 1945.

El hombre moderno enemistó el saber con la sabiduría. Algunos creen que la falta de Dios nos trajo a este lugar descorazonador. Pero por desgracia la violencia estuvo unida a la idea de la divinidad desde la orgía de sangre de Moisés, cuya crónica es el Pentateuco, hasta las cruzadas de Roma contra cátaros y musulmanes y la Inquisición. El terrorismo de izquierda en Occidente tiene origen en cierto fundamentalismo de estirpe judaica. Lo mismo que el de derecha. Carlos Castaño y Pinochet eran unos canallas que a veces se purificaban en la eucaristía y consultaban los terrores de su intimidad con los purpurados de su iglesia. Y George Bush, hijo, se sintió encargado por Dios para desatar el infierno en Irak en su Santo Nombre. George, ve y combate a los terroristas, dijo el nefasto inquilino de la Casa Blanca que le dijo el Señor. Y él atendió el oráculo: son inolvidables esos niños mutilados entre gasas purulentas en los hospitales iraquíes, y esas mujeres y esos hombres que huyen entre las llamas de Bagdad de los bombarderos de la cristiandad.

Muchos horrores vienen menos de la ausencia de Dios que de un exceso de Dios. Menos de los pobres ateos con sus vicios intelectuales que de sus fieles con sus prístinos himnos. Bush, Ben Laden y los belicosos rabinos de Jerusalén hacen pensar que no son los pecados capitales los que vuelven tan peligrosas a veces a las personas sino una patológica obsesión de pureza y la arrogancia de la verdad. Fernando González escribió con razón: tan bueno es Dios que me inspiró que lo negara. El místico alemán Eckhart pedía a Dios que lo salvara del deseo de Dios. Y el judío Bashevis Singer dijo que la verdadera religión toca más con las relaciones que mantenemos con el Otro que con los deberes con Dios más fáciles de cumplir. La caridad debería primar sobre la fe. Pero es más fácil matar en nombre del Bien. Truman Capote observó que todos los criminales que conocía creían en Dios, y tenían un tatuaje en alguna parte.

La palabra ateo oculta una mística nobleza. Según Ernst Bloch fue inventada por Nerón para los primitivos cristianos que se negaban a adorarlo. Vigorosamente insatisfecho y abierto, tan poco nihilista a pesar de su negación, el ateísmo es nuestra porción mejor, el coraje moral de vivir y trascender en un nuevo espacio prometeico-piadoso, escribió Bloch. Y, claro, fue acusado de ceguera por los creyentes. Borges, que no fue un ciego figurado, dijo algo que puede aducirse en su defensa: conozco muchas personas que ven, y que no son particularmente felices o sabias. 

 

Eduardo Escobar

 

Tomado del periódico El Tiempo. Domingo 5 de septiembre de 2010. Dios o el prójimo de Eduardo Escobar.

http://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/eduardoescobar/dios-o-el-projimo_7894905-1

Tomado de la Revista Semana. Sábado 4 de septiembre de 2010. 
No falta quien quiera verlo caído, pero yo, al menos, me permito estar de acuerdo con ese prohombre que es Juan Lozano, con ese ejemplo de rectitud que es Fabio Valencia Cossio, y pido respeto para el ex presidente Uribe. Ahora está de moda atacarlo. ¿De cuándo acá se le acusa de traidor a la patria y hay quienes señalan, incluso, que la reelección fue ilegal? ¿Qué significa que haya sido ilegal? ¿Qué no existió? Si el segundo periodo de Uribe fue ilegal, sea este el momento de hacerle un reconocimiento al doctor Andrés Uriel Gallego, que fue el único que cumplió la ley porque nunca hizo nada.

Yo, en cambio, me permito reivindicar a Álvaro Uribe. Pocos, como él, merecen un lugar en nuestra historia patria. Ayudado, claro, porque ¿a quién queremos engañar?: el ex presidente podía ser muy querido y todo, pero era muy mal hablado, muy grosero. Daban ganas de lavarle la boca con agua y con Jabón, sobre todo con Jabón, en caso de que estuviera vivo, claro.

Por fortuna, los mismos libros de historia se encargarán de corregir su vocabulario y magnificar su presencia. ¿Con qué palabras grandilocuentes los manuales escolares del futuro maquillarán la vida agropecuaria del presidente Uribe, sus ordinarios gustos de chapotear en ríos carmelitos, de insultarse con peluqueros, de capar caballos? Me imagino que lo van a describir como un hombre fornido, parecido a Pepe Cortisona, que se metía en caudalosas vertientes cristalinas a rescatar ministros, y que en lugar de gritarles a unos indígenas que no le dijeran marica, que no le dijeran paraco, imploraba con grandeza de prócer: «Nativos: no me llaméis alambicado, no me llaméis reformador; de lo contrario, os lastimaré el rostro, por féminas».

La Historia se escribe con eufemismos. ¿Alguien de verdad cree que José Acevedo y Gómez dijo aquello de «si no aprovecháis estos momentos de efervescencia y calor, etcétera, ved los calabozos y las cadenas que os esperan»? Era un tipo de Charalá, Santander. Debió gritar, cuanto mucho: «Háganle, juepuercas, cásquenles a esos españoles o nos van a agarrar es ellos».

Lo digo a sabiendas de que mis conocimientos en historia patria no abundan. De hecho, cada vez que hablan de ‘Carabobo’ no sé todavía si se refieren a una batalla o a un departamento o a Juan Manuel Galán.

Pero el mismo Santos dijo que Uribe era nuestro segundo libertador y estuvo tentado a ponerle ya no recuerdo si la Orden de San Jorge o si la orden de captura.

Insto, pues, a que tratemos al doctor Uribe como el prócer que es: a que las futuras generaciones puedan hacer un tour por El Ubérrimo y tomarse fotos ante una estatua ecuestre en la que el ex presidente aparezca sorbiendo tinto; a que diseñen un paseo guiado por los lotes de la zona franca; a que construyan un bronce de José Obdulio, con el huevo escurriendo en la frente. Y a que florezcan sendos párrafos en los que se defienda su obra. No es difícil hacerlo. Es cierto que el ex presidente polarizó al país; pero eso es poco en comparación con un político como Javier Cáceres, que polarizó los vidrios de la sala. Y nadie puede negar que Uribe agilizó el sistema de salud. Antes, la gente llegaba a un hospital, esperaba siete horas en un pasillo y al final se moría. En su gobierno, en cambio, antes de morirse, el enfermo esperaba como mucho una hora y media.

Estoy con Juan Lozano, ese prohombre independiente; estoy con Fabio Valencia, ese faro de la ética. Uribe merece un gran lugar en nuestra historia. Propongo hacerle un busto. Un busto grande: 38D. Tengo al cirujano de Medellín que se lo hace gratis.

Pero es fundamental que no nos deje solos. Miren el abandono en el que estamos los uribistas de verdad: no hablo de Benedetti o de Rivera, que como buenos anfibios ya se adaptaron. Hablo de los cuadrúpedos. Ya nadie mira al ‘Pincher’ Arias, por ejemplo, que está al borde de una depresión: su amo se fue de viaje y no le dejó una prenda, un poncho siquiera, para ponerle en la caja en que duerme y que no extrañara.

Nadie niega que este nuevo gobierno esparció en el aire una espora de optimismo. La economía pinta bien. Las relaciones exteriores mejoraron. Y ‘el Profe’ Vélez anunció su retiro (cosa que, imagino, unos pocos apátridas celebrarán, pero que a mí me llena de congoja: ayayay, cómo lo extrañaré. Me siento ya mismo a escribirle un homenaje de despedida. Desde ahora lo anuncio).

Pero por bien que lo haya hecho, Juan Manuel no ha parado de ofender al ex presidente Uribe. Se convirtió en su antítesis: se arregló con Chávez, recibió a Piedad Córdoba, hizo las paces con las Cortes. Y está nombrando ministros técnicos, lo cual es grave, porque ‘el Bolillo’ Gómez puede terminar en el gabinete. No es coincidencia que la misma semana en que Juan Lozano salió a defender a Uribe, Julio Nava, el cantante famoso por morder narices prominentes, anunciara su regreso. Quieren intimidar al senador.

Por eso pedimos a gritos que Uribe abandone su cátedra en la universidad extranjera, donde dicta Chuzadas II en una facultad de Tecnología, y regrese cuanto antes al país. En un comienzo será extraño verlo caminar con su busto enorme, con sus tres huevos, mientras pide a gritos que lo respeten. Pero, como bien dijo don José Acevedo y Gómez, «hay que cascarles a esos jijuepuercas. O nos van a agarrar es ellos».

 

Revista Semana. Sábado 4 de septiembre de 2010.  Un busto para Uribe de Daniel Samper Ospina.

http://www.semana.com/noticias-opinion/busto-para-uribe/144007.aspx